La Asociación de Amigos de Écija entregaba el pasado viernes, 16 de febrero, las menciones y “soles” concedidos a particulares, colectivos y asociaciones en la vigésima cuarta edición de los Premios en Defensa del Patrimonio Histórico-Artístico de la ciudad.
Una entrega que se llevaba a cabo como novedad en el Teatro Municipal de Écija, donde se desarrolló esta gala que organizaba por primera vez la nueva Junta Directiva de la asociación ecijana, la cual resultó elegida el pasado mes de noviembre.
Una gala que estuvo presentada por María Miró y Fernando Pérez, que daba comienzo con un video realizado por la asociación con imágenes de la ciudad, al que se le incorporaba la voz de Marcelino Fernández Piñon, recordándolo de este modo en el décimo aniversario de su fallecimiento.
Dando paso a la entrega de las cinco menciones a personas y actuaciones destacadas en el patrimonio local, como son las de Marina Martín Ojeda, por su trabajo como Archivera Municipal del Ayuntamiento de Écija; Rafael Cano Rodríguez, por una vida dedicada al mundo de la imprenta, desde donde ha realizado numerosas publicaciones que han servido para conocer mejor nuestras fiestas y costumbres populares; a título póstumo a Antonio Siria González, por haber sido un referente cultural a través de sus numerosos estudios y publicaciones sobre la ciudad; la restauración del Stmo. Cristo de la Exaltación en la Cruz de la Hermandad de la Piedad y la publicación “Tomás Beviá Aranda, el rojo que tenía la hostia blanca”, de Ceferino Aguilera Ochoa.
Tras lo cual, se hizo una parada musical en la gala para homenajear al grupo ecijano de sevillanas Los del Valle, con motivo del cuarenta aniversario del lanzamiento de su primer disco, el cual deleito a los presentes con la interpretación de algunos de sus temas.
Una actuación, que dio paso a la entrega de los cinco “soles”, a aquellas intervenciones finalizadas en 2023 en viviendas y edificios, que se han ejecutado respetando el entorno histórico-artístico en el que se encuentran, como ha sido la rehabilitación del Mirador de los Marqueses de Peñaflor; o la reforma de una vivienda unifamiliar en la calle Santa Ángela de la Cruz, 16; nuevas plantas en viviendas unifamiliares en las calles Arcipreste Aparicio, 3 (antiguo Mesón “El Gallego”), José Herráinz Caraballo, 6 y San Juan Bosco, 40 (junto a Fuente Nueva).
El acto de entrega de premios, contó con la presencia de gran parte de la Corporación Municipal, entre ellos la alcaldesa de la ciudad, Silvia Heredia, que expresaba el compromiso del ayuntamiento con el trabajo que realiza la asociación, a la cual ha hecho responsable en parte de “la pasión por nuestro patrimonio” que ha adquirido la ciudadanía, a través de sus actividades. En el ámbito de la administración local considera que Amigos de Écija “nos ha enseñado mucho, y nos ha hecho trabajar por Écija”.
Por su parte, el presidente de Amigos de Écija, Eugenio Benjumea, aprovechaba su intervención para detallar algunos de los objetivos que se plantea la nueva Junta Directiva, y que pasan por “renovar la actividad de la asociación: hacia afuera y hacia adentro. Revitalizar el espíritu crítico, a la par que constructivo, que siempre tuvo Amigos de Écija”.
La nueva dirección ha continuado Benjumea, cumplirá “con nuestros fines estatutarios, pero, sobre todo, con la voluntad de seguir siendo útiles a la sociedad ecijana. Sabiéndonos deudores del monumental trabajo de los que nos precedieron, maestros en el amor por la ciudad”; además, el presidente ha querido ser tajante en que “esa es también nuestra única motivación y nuestro exclusivo compromiso. Que nadie se equivoque. El amor por Écija traducido en la defensa de su rico patrimonios es nuestra única razón de ser”.
Benjumea ha aprovechado para invitar a los asistentes a que se sumen a este nuevo proyecto, siendo socios y miembros activos de la asociación. En este punto también ha querido hacer un llamamiento a los jóvenes “para aprender de ellos y que sean, de verdad, los protagonistas en la vida cultural ecijana del siglo XXI”.
Premio “Huevo frito”
Entre las novedades que ha presentado esta edición de los premios de patrimonio, la asociación ha introducido el que se denomina como el premio “Huevo frito”, un anti-premio que ha sido elegido por la ciudadanía a través de redes sociales y una encuestas en la página web, como una denuncia a la inacción en distintos aspectos y actuaciones.
La denominación de “Huevo frito” ya es una crítica en sí mismo y que responde a la lamentable imagen que se difunde de la ciudad durante los meses de verano cuando los medios de comunicación nacionales y regionales, se desplazan a la ciudad para “demostrar”, que las altas temperaturas de la ciudad permiten freír un huevo en el suelo, sin preocuparse por destinar los recursos que supone una conexión de este tipo, para dar visibilidad al rico patrimonio ecijano, su historia y sus problemas.
En esta primera edición el premio “Huevo frito” ha sido para la situación global que presenta la Plaza de España “El Salón” y el edificio del ayuntamiento, que ha sido la más votada de cinco propuestas.
El broche final a la gala lo puso el Coro de Cámara Polymnia, que interpretaba bajo la dirección de Caridad Asensio, una nueva versión del himno de la ciudad de Écija, que ha realizado Miguel Aguilar Jiménez, sobre la composición original de Miguel Tena y Antonio Morales.