Este verano, se ha iniciado en los campos de la provincia sevillana entre los que están incluidos los pertenecientes al término municipal de Écija, un proyecto-prueba para realizar una agricultura optimizada y sostenible en la que se ahorre agua y que tenga un menor impacto ambiental.
Un proyecto-prueba que se desarrollará durante los próximos veinticuatros meses, en una serie de fincas sevillanas en la que se cultiva olivar, cítricos o almendro, unos cultivos que están presentes en los campos ecijanos que formarán parte de este estudio.
El sistema, consiste en la instalación de cámaras y sensores que procesaran todos los datos para informar al agricultor a través de un dispositivo Móvil o Tablet de cómo se encuentra los cultivos en tiempo real, una ayuda, que facilitará toma de decisiones sobre el momento y lugar más apropiado para actuar en el campo y regar los cultivos, con lo que se bajará el excesivo consumo de agua y la contaminación ambiental en la agricultura.
En este proyecto-prueba, participan entidades como Asaja Sevilla, el Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Sevilla (IRNAS- CSIC), la Comunidad de Regantes del Valle Inferior del Guadalquivir y una empresa privada de la capital hispalense.